XXXVI Congreso SETH
XXXVI Congreso Nacional de la Sociedad Española de Trombosis y Hemostasia 170 El 30,4 % se siguió durante 1 año y el 18,8 % durante 2 años, de los que el 19 % y 16,7 % respectivamente tuvo un TRT = 60 % (Fig. 1). En ninguno de los periodos analizados se hallaron di- ferencias entre TRT y sexo, edad, indicación o INR target. La mediana de controles INR en el 1. er año de seguimiento fue de 11 (IQR 3-19), siendo mayor en los pacientes con TRT < 60 % (p = 0,027). 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 1 er MES 3 er MES 6 MES 1 er AÑO 2 AÑO Tiempo en rango terapéutico durante el seguimiento < 60 % >= 60 % Figura 1. Tiempo en rango. La causa más frecuente de interrupción temporal del tra- tamiento fue la hospitalización (20,9 %). De los pacientes que ingresaron, solo un 3,7 % tenía un TRT = 60 % a los 6 meses de seguimiento, frente a un 24,1 % de los que no ingresaron (p = 0,021). El 4,7 % de pacientes tuvo complicaciones hemorrá- gicas (en su mayoría epistaxis leves) y un 0,5 % eventos trom- bóticos, sin diferencias estadísticamente significativas entre TRT de pacientes sin y con complicaciones hemorrágicas (p = 0,230), aunque estos tuvieron un mayor número de controles de INR > 5 (p = 0,001). Conclusiones: Las complicaciones derivadas de del trata- miento con AVK fueron poco frecuentes y leves, a pesar de que menos del 20 % de pacientes alcanzó un TRT = 60 % durante el seguimiento, lo que sugiere su seguridad en población pediátrica. La interrupción temporal del tratamiento durante la hospitaliza- ción fue un factor de riesgo de mal control. Conflicto de interés: Los autores declaran no tener ningún conflicto de interés. PO-377 Berlin Heart ® EXCOR en pacientes pediátricos: análisis de eventos trombohemorrágicos y control de la hemostasia. Diez años de experiencia en un hospital terciario Argüello de Tomás M; Gómez de Antonio R; Santiago MJ; Pérez Rus G; Díez-Martín JL; Sánchez Galindo A; Pascual Izquierdo C Hospital General Universitario Gregorio Marañón. Madrid Introducción y objetivos: Los dispositivos de asistencia ventricular (DAV) Berlin-Heart ® EXCOR (BHE) son usados como puente al trasplante cardiaco (TC) en insuficiencia cardia- ca terminal (ICT). Los eventos trombohemorrágicos (ETH) son la principal complicación, lo que exige un control estricto de la anticoagulación y antiagregación. El objetivo de nuestro estudio fue describir los ETH y controles de hemostasia en población pe- diátrica con BHE de nuestro centro. Material y métodos: Se han analizado retrospectivamente 18 pacientes con BHE entre 2009 y 2020. Un paciente recibió un TC el mismo día del implante del BHE por lo que se excluyó del análisis estadístico. Se han revisado 397 controles analíticos con- sistentes en hemograma y hemostasia básica y especial, diarios durante la primera semana y posteriormente cada 2-7 días. Se han incluido controles de cada ETH y de los 2 días previos. Los con- troles se han basado en nuestro “Protocolo de Anticoagulación de Pacientes Pediátricos con BHE” (Fig. 1). Se utilizaron medianas, rangos intercuartílicos y porcentajes para el análisis descriptivo y los test de X2 y t de Student para la comparación de variables. Resultados: La mediana de edad fue 15,9 meses (4,6-43,6). El 66,7 % fueron varones. La principal indicación del BHE fue miocardiopatía dilatada (55,6 %), seguida de cardiopatías con- génitas (27,8 %) y miocarditis (16,7 %). El BHE se mantuvo durante una mediana de 20,5 días (13-66,5). Predominaron los BHE de soporte biventricular (66,6 %). Las características de los controles se recogen en la tabla I. La heparina de bajo peso mole- cular (HBPM) fue el tratamiento de mayor duración (p = 0,002), durante el que hubo menor tasa de trombopenia (p = 0,019) y mayor tasa (p = 0,011) y tiempo (p = 0,002) en rango terapéu- tico. Este hecho es probablemente secundario a que la heparina no fraccionada (HNF) es la anticoagulación de elección de inicio según nuestro protocolo, cuando el paciente presenta mayor ines- tabilidad clínica y analítica. El 38,3 % de los controles con Multiplate ® de la antiagregación con ácido acetilsalicílico (AAS) y clopidogrel estuvieron en rango. Hubo un total de 40 ETH, padeciendo todos los pacientes al menos un ETH, con una mediana de 2 ETH/paciente (1-3). La hemorragia fue el más frecuente (52,5 %), seguida de la trom- bosis del DAV (30 %) y trombosis clínicas (17,5 %), en todos los casos ictus isquémicos. Las principales características de los ETH se exponen en la tabla II. Las hemorragias fueron las complicaciones más precoces (p = 0,023); en el 42,9 % la terapia antitrombótica estaba en rango precipitante (supraterapéutico) en las 48 horas previas, similar a las otras complicaciones, por lo que probablemente factores no relacionados con el control de la hemostasia precipiten el sangrado en momentos más tempranos. El 66,7 % de los pacientes recibieron un TC. La tasa de mor- talidad en el periodo mientras el BHE estuvo implantado fue del 27,8 %: 4 por fracaso multiorgánico en contexto de sepsis o ICT y 1 por hemorragia masiva. El paciente fallecido por hemorragia presentaba coagulopatía grave adquirida previa al DAV. Conclusiones: En nuestra serie el control protocolizado de anticoagulación y antiagregación ha permitido un manejo diri- gido de ETH, y además ha podido evitar complicaciones trom- bohemorrágicas potencialmente mortales. Destaca una primera fase cuando coexiste una menor estabilidad del tratamiento an- titrombótico con un mayor riesgo de hemorragias, favorecidas probablemente por la cirugía y la gravedad del paciente. El uso de HBPM podría ofrecer mejor estabilidad terapéutica, aunque sin disminuir los ETH.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy OTI4NTYw