XXXVI Congreso SETH

Publicación 297 PB-132 e-Thrombosis en época COVID-19. Efectos colaterales del confinamiento Franch Llasat D, Roche Campo F, Mayor Vázquez EA, Del Corral Rodríguez E, Casacuberta Barbera N, Concha Martínez P, Domingo Marco J, Pedregosa Díaz J, Herrero Redondo M, Masdeu Eixarch G, Vázquez Casas JR, Martínez Moreno I, Franch Llasat R, Escurriola Ayora N, Rodríguez Luaces M, Sans Mateu T, Font Ferre L, Ortin Font X Hospital Verge de la Cinta. Tortosa, Tarragona Introducción: La infección por el coronavirus SARS-CoV-2 causante de la enfermedad COVID-19 ha provocado una pande- mia de enormes repercusiones sanitarias. El estado de alarma de- cretado por el gobierno español incluyó el confinamiento de sus ciudadanos durante 60 días. En este tiempo, muchos ciudadanos disminuyeron la actividad física y aumentaron las horas de in- movilidad. Casos clínicos: Describimos los casos de 4 pacientes jóvenes que ingresaron en UCI con tromboembolismo pulmonar (TEP) grave en un periodo de 10 días (del 22 al 30 de abril) después de un mes de confinamiento (iniciado el 15 de marzo y prolongado hasta el 11 de mayo). Ninguno presentó la COVID-19 (descarta- do por PCR y serologías) y presentaban pocos de los factores de riesgo habituales. Los pacientes fueron tratados con heparina de bajo molecular y la evolución fue satisfactoria. Rápidamente nos llamó la atención el elevado número de casos en tan poco espacio de tiempo. En los últimos tres años, en nuestra UCI hemos ingre- sado una media de 7 TEP al año sin una especial mayor inciden- cia durante el mes de abril. En los últimos años, está tomando relevancia el impacto de la inmovilidad en relación con el uso de los ordenadores y la inci- dencia de TEP (e-Thrombosis). La inmovilidad se ha definido de manera arbitraria como estar sentado al menos 8 horas al día, de las cuales, al menos 3 h seguidas sin levantarse de la silla en las últimas 4 semanas. La inmovilidad prolongada favorece la estasis venosa en las venas de las extremidades inferiores al disminuir el efecto compresor de la contracción muscular sobre las venas. También hay datos que sugieren un aumento de la hipercoagula- bilidad y de disfunción endotelial. En las encuestas que realizamos a posteriori, 3 de los 4 pa- cientes referían haber estado sentados más de 8 horas al día de media en las últimas semanas. Estos tres pacientes presentaban al menos sobrepeso y uno de ellos tenía antecedente de trombosis venosa profunda y una cirugía menor reciente. El otro paciente refería haber estado unas 6 horas de media sentado al día y fue el único de los 4 que presentó un estudio de coagulación anómalo que se tradujo en un anticuerpo lúpico positivo. Para terminar el estudio, realizamos el estudio de factores genéticos a pesar de que su relevancia clínica no está clara. Ninguno de los pacientes presentó alguna de las alteraciones más frecuentes. Discusión: Estos datos sugieren que la inmovilidad prolon- gada en casa junto a otros factores de riesgo (en nuestro caso, sobrepeso, antecedentes de enfermedad tromboembólica venosa y trombofilia), puede asociarse a mayor incidencia de TEP. En caso de nuevo rebrote de la pandemia, los clínicos deberán estar atentos a esta posibilidad y los Servicios de Salud Pública debe- rán plantearse recomendar el ejercicio en casa. En un futuro y si el teletrabajo se asienta como opción laboral, deberemos tener presente esta enfermedad y su prevención. PB-133 Complicaciones trombóticas y hemorrágicas en pacientes COVID-19 ingresados en una unidad de cuidados intensivos Civeira Marín M, Rodríguez Sanz J, Viñuales Aranda MD, Cazorla Poderoso L, Merchante Andreu M, Fernández Mosteirín N, Hernández Mata CF, Martín-Consuegra Ramos S, Gómez Martínez A, González Gómez E, Moreno Carbonell M, Rodríguez Lefler C, López Peña A, Calvo Villas JM Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza Introducción : La infección por SARS-CoV-2 (COVID-19) predispone a padecer eventos trombóticos arteriales y venosos. El componente inflamatorio, la inmovilización o la hipoxia son factores que pueden explicarlo. Pese al aumento en los últimos meses de publicaciones al respecto, siguen siendo necesarios es- tudios que muestren la incidencia en la práctica clínica habitual. Objetivo: Nuestro objetivo principal es describir las com- plicaciones trombóticas venosas y arteriales, así como hemorrá- gicas, en pacientes con COVID-19 ingresados en la unidad de cuidados intensivos (UCI) de nuestro hospital. Como objetivos secundarios analizar los factores de riesgo tromboembólico y el impacto de estos eventos en la mortalidad. Métodos: Estudio observacional, longitudinal, descriptivo y retrospectivo realizado en un hospital universitario de tercer nivel. Se incluyeron pacientes ingresados en UCI de febrero a junio de 2020, mayores de edad, con diagnóstico de COVID-19 confirmado mediante técnica microbiológica de RT-PCR o bien por cuadro clínico y radiológico compatible. Se registraron las trombosis arteriales y venosas, así como eventos hemorrágicos en el periodo referido. Los datos sociodemográficos, analíticos y clínicos se obtuvie- ron de la historia clínica electrónica. Resultados: De los 72 pacientes incluidos, la edad media fue de 66,39 años; siendo 48 de ellos varones (66,7 %). Otras carac- terísticas basales de la muestra quedan reflejadas en la tabla I. Presentaron complicaciones trombohemorrágicas 14 pacien- tes (19,4 %), siendo la incidencia acumulada de trombosis de 8,3 % (6 eventos) frente a 11,1 % (8 eventos) de hemorragias. La trombosis venosa profunda fue el evento trombótico más frecuente (3 eventos), seguido del tromboembolismo pulmonar (2 eventos) y accidente cerebrovascular (1 evento). Todos los diag- nósticos fueron confirmados mediante pruebas de imagen. Dentro de las hemorragias, cuatro fueron digestivas, dos epis- taxis, una pulmonar y una relacionada con la colocación de caté- ter venoso central. Fallecieron 25 pacientes (34,7 %), de los cuales 5 sufrieron complicaciones trombohemorrágicas, siendo mayor la mortalidad en los sujetos quepadecieronepisodios hemorrágicos (50%) que en los trombóticos (16,7 %).